¿Nos cruzamos por destino o por deseo?
En el momento en que la conexión se apoya en aspecto fÃsico más el magnetismo repentino, el idilio tiende a volverse fugaz. Extremadamente limitado. Parecido a los aparatos que calientan en segundos, que simplemente encienden al toque, pero se dañan pronto. Basar una relación exclusivamente en el atractivo exterior, es parecido a apostarle al